Si deseas dedicarte a la venta de mercadería sin comprometer tu espacio físico el dropshipping es, indudablemte, la alternativa ideal.
El concepto es muy sencillo: se trata de una simple venta al por menor en la que, en lugar de contar con los artículos en tu inventario, solo te encargas de tomar el pedido y pasárselo al mayorista el cual, a su vez, se lo enviará al cliente.
Dicho esto, tú solo eres el intermediario entre tu propio cliente y tu proveedor; tu ganancia proviene de la diferencia entre el precio de lista al público y el precio de compra que el mayorista ha acordado contigo.
¿Qué es el drophipping?
El Dropshipping es un modelo de negocio basado en la venta al por menor a través de internet en la cual el vendedor no tiene un stock propio de productos. En cambio, cuando se cierra una venta, el vendedor compra el producto a un tercero (normalmente, un mayorista o fabricante) y lo envía directamente al cliente final.
En este modelo de comercio electrónico, el vendedor es solo un intermediario entre el propio cliente y el proveedor; la ganancia proviene de la diferencia entre los precios de venta al público y los precios de compra que el mayorista ha acordado.
¿Cómo funciona el dropshipping?
Tal y cómo hemos visto por la definición, en el dropshipping intervienen tres partes:
- Comerciante minorista: se encarga de gestionar una tienda online, en la que presenta los distintos artículos para la venta.
- Dropshipper o proveedores de dropshipping: cuentan con el stock de los artículos y se encargan de recibir las órdenes del minorista y enviar los productos al cliente final a través de empresas de mensajería.
- Cliente: realiza su compra en el ecommerce del minorista y recibe el envío directamente del proveedor.
Desde la producción hasta el envío, el proceso del dropshipping es el siguiente:
- El comerciante minorista crea una tienda online con el objetivo de vender productos.
- El cliente llega a la página web y decide comprar un producto, el cual paga directamente al minorista.
- Una vez recibido el pedido, el minorista a su vez envía un pedido al proveedor de dropshipping o mayorista, y le paga el producto (a precio de coste). El beneficio que el minorista obtiene será la diferencia entre el precio de venta recibido por el cliente y el coste del producto.
- El proveedor o mayorista recibe la orden y envía el producto en cuestión directamente al cliente final.
- El cliente recibe su compra y cualquier problema o reclamación que pueda surgir se gestiona directamente con el comerciante minorista.
En todo este proceso, cómo podemos ver, las responsabilidades del comerciante y el mayorista son diferentes.
En este sentido, el minorista debe encargarse de:
- Gestionar el ecommerce y presentar los artículos para la venta.
- Adquisición de los productos al mayorista o proveedor.
- Concreción de las ventas.
- Recepción de los pagos del cliente.
- Envío de información al mayorista: características del pedido, dirección del cliente, etc.
- Confección y envío de la factura correspondiente al cliente (también se puede arreglar con el dropshipper para que esta junto con el pedido).
- Atención al cliente y resolución de conflictos: si durante el proceso de compra surgen problemas con el producto, fechas de envío, calidad, etc., la responsabilidad será del minorista y será quien deba responder ante las quejas o reclamaciones del cliente.
Por otro lado, las responsabilidades del proveedor de dropshipping incluyen:
- Recibir las órdenes de compra enviadas por el minorista.
- Envío de los artículos al cliente final, en nombre del minorista en cuestión. Esto incluye todas las gestiones correspondientes con las empresas de mensajería.
- Respeto por la privacidad de los datos del cliente final.
- Conducta ética con respecto al minorista: en este punto, ambas partes firman, generalmente, una cláusula de confidencialidad.
- Devoluciones.
Ventajas y desventajas del dropshipping
Si estás pensando en iniciar un negocio de dropshipping, primero debes analizar bien sus ventajas y desventajas.
Ventajas
Repasemos primero las distintas ventajas de este modelo de negocio:
- No requiere una gran inversión: el primer o principal beneficio es, sin duda, que no tienes que realizar una inversión inicial en stock ni instalaciones. La ventaja inmediata derivada de esta situación es que tampoco tendrás que afrontar costes por obsolescencia o deterioro de los productos.
- Logística: otra ventaja es que, como el mayorista o dropshipper se ocupa de todo lo referente al envío, al hacer uso de su infraestructura tampoco debes ocuparte de todas las preocupaciones relacionadas a la logística.
- Escalabilidad: el proceso de dropshipping implica que el minorista no asume riesgos por lo que puede probar con diferentes productos e ir perfeccionando cuáles funcionan mejor para su negocio.
- Personal: otra ventaja del dropshipping es que no tiene por qué conllevar gastos de contratación de personal, al no tener almacén con productos no es necesario personal para gestionarlo. El minorista puede comercializar productos directamente desde casa, gestionando el sitio web o tienda en línea.
Desventajas
En cuanto a las desventajas o inconvenientes de este modelo de negocio, podemos encontrar:
- Gran competencia: en este tipo de negocios la competencia puede llegar a ser asfixiante, lo que puede obligar al minorista a mantener un precio competitivo para intentar mantener o levantar las ventas. Antes de abrir un ecommerce es clave escoger un nicho de mercado rentable, con suficiente demanda pero sin un alto volumen de competidores.
- Márgenes bajos: por lo general, la alta competencia implica mantener precios competitivos, lo que a su vez supone que los minoristas tienen un margen de beneficio bajo.
- Problemas logísticos: pese a que sea el mayorista quien se encarga del inventario y los envíos, si hay retrasos o incidentes en el camino el cliente enviará sus reclamaciones y quejas directamente al minorista.
- Dependencia de los proveedores: por mucho que el minorista se esfuerce, el negocio también dependerá indirectamente de la seriedad y profesionalidad del mayorista. Si el mayorista no cumple con sus obligaciones, esto puede conducir a una mala experiencia del cliente, lo que puede afectar a la reputación de la tienda. Es importante que el dropshipper o mayorista sea de confianza: puntual en las entregas y cuidadoso con el producto.
- Gastos de envíos: si el comerciante minorista cuenta con más de un proveedor de dropshipping, nos podemos encontrar con el caso de que el cliente en un mismo pedido compre artículos de diferentes proveedores y, en vez de recibir un único paquete, deba esperar dos paquetes separados, con su consecuente implicación en los gastos de envío.
- Requiere gran trabajo en SEM y SEO: por último, es importante tener en cuenta que el posicionamiento de la web será muy importante en las ventas del negocio, ya que, si la tienda no recibe tráfico, las ventas serán muy bajas. Esto implica destinar presupuesto y dedicación a las estrategias SEO y SEM.
Cómo ves, el dropshipping puede conllevar múltiples beneficios o ventajas para el minorista, pero también tiene desventajas que es importante estudiar y tener en cuenta antes de iniciar un negocio.
La elección de un buen producto y nicho de mercado, las negociaciones de condiciones con el distribuidor de confianza y las distintas estrategias de marketing serán claves para la rentabilidad del negocio. ¡Tenlo siempre en cuenta!
Publicado originalmente el 20 de diciembre de 2014, actualizado el 8 de septiembre de 2022.
Revisado y validado por Susana Meijomil, Inbound Content Marketing Manager en InboundCycle.
Inés Cumplido
Account Executive en InboundCycle, se encarga de implementar y coordinar proyectos de Inbound Marketing de empresas de diferentes sectores. Graduada en Administración y Dirección de Empresas en la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona.