La captación de necesidades representa siempre el punto de partida en un proyecto web, y se materializa en una o varias reuniones con el cliente para sondear y definir qué objetivos debe cubrir el trabajo encargado. Después de cada sesión, hay que elaborar un documento en forma de acta, en que se recojan los puntos tratados, los acuerdos a los que se ha llegado y las conclusiones obtenidas.
Del mismo modo, el buen desarrollo del proyecto se asocia a una adecuada captación de necesidades en todos los ámbitos que abarca:
- la arquitectura de la información
- el diseño
- la programación
Para llegar a comprender en profundidad la magnitud y objetivos del proyecto —lo que permitirá desplegar un trabajo de calidad por parte del departamento de marketing—, es imprescindible implementar correctamente la primera etapa de captación de necesidades.
Si se quiere conocer bien las características del proyecto, hay que plantear muchas cuestiones y hacer muchas preguntas, algunas de las cuales son condición sine qua non. Nos referimos, por ejemplo:
- Definir cuál es el objetivo principal y cuáles son las necesidades concretas.
- Qué circunstancias y problemáticas actuales del proyecto –en el caso de que ya exista– y de la empresa están en juego.
- Quién y cómo es el target al que nos dirigimos.
- Quiénes son nuestros competidores y dónde están.
- Qué empresas o marcas tiene el cliente como referentes.
- Qué tecnología emplearemos y con qué alcance, en cuanto a compatibilidad de dispositivos, diseño y usabilidad. Se trata de obtener la máxima información posible del cliente.
Ahora bien: ¿cómo se materializar la captación de necesidades? Sin duda la técnica más efectiva es la entrevista, que puede llevarse a cabo en diversas reuniones con el cliente, con el propósito de recabar todos los detalles. Tras cada una de ellas, hay que redactar un acta que recoja los temas tratados y las decisiones tomadas. Se trata de un documento que se envía al cliente a posteriori para que éste pueda rectificar, modificar o añadir todo cuanto crea oportuno, con el fin de matizar, detallar o corroborar el contenido plasmado en el escrito.
En definitiva, conviene recordar que la captación de necesidades es el primer paso de cualquier proyecto web. Por lo tanto, debe realizarse con atención y esmero, recopilando toda la información que pueda ser relevante para el buen desarrollo del trabajo.
Una correcta captación de necesidades asegura en buena parte el éxito del proyecto y, asimismo, suele significar un importante ahorro de tiempo, dinero y recursos.
Por Xavier Valdés