Resumen:
Un cliente empezó a demorarse mucho en el pago de la última factura del proyecto.
Desde Finanzas hicieron varios recordatorios a cliente sin éxito hasta que entendieron que nos encontrábamos ante una situación de impago. Entonces, nos recomendaron a Cuentas dejar de dar servicio (es decir, pausar la ejecución del proyecto).
Agendamos una llamada desde Cuentas con nuestra interlocutora del proyecto para informarle de la situación de impago y la directriz de nuestra Dirección y Departamento de Finanzas de parar el proyecto. Desde ese momento, adoptamos un rol de "poli bueno" (Cuentas) y "poli malo" (Finanzas).
Enviamos un email a cliente informando de la pausa del proyecto y Finanzas empezó vías legales de reclamación.
Vídeo: